El motivo principal de esta moneda de 2 euros conmemorativa de San Marino es el 200 Aniversario del Fallecimiento de Antonio Canova (Possagno, 1 de noviembre de 1757 – Venecia, 13 de octubre de 1822).
Su juventud transcurrió en talleres de arte, donde mostró una clara predilección por la escultura. A la temprana edad de nueve años, demostró su talento al crear dos pequeños altar-relicarios de mármol que aún existen hoy en día, lo que llevó a su abuelo a encargarle diversos trabajos. El abuelo, respaldado por la adinerada familia Falier de Venecia, reconoció el potencial del joven Canova, y el senador Giovanni Falier se convirtió en su mentor y protector. Gracias a él, a la edad de trece años, Canova fue puesto bajo la dirección de Giuseppe Bernardi, uno de los escultores más destacados de su generación en el Véneto.
Pronto, sus obras recibieron elogios por su virtuosismo precoz y comenzaron a surgir los primeros encargos. Estudió en la Academia de Arte de Venecia bajo la tutela de Giovanni Ferrari, y durante este tiempo esculpió numerosas obras, incluyendo Orfeo y Eurídice, un Apolo, y el grupo escultórico Dédalo e Ícaro.
A finales de 1779, se trasladó a Roma, donde creó Teseo y el Minotauro (1781), recibido con gran entusiasmo. Su siguiente encargo destacado fue un monumento funerario destinado a la Basílica de San Pedro, en honor al papa Clemente XIV.
Durante los años siguientes, Canova produjo un número significativo de nuevos trabajos, como la estatua de la Diosa Hebe, diseño principal de esta moneda conmemorativa de 2 euros. Y en 1802, fue invitado por Napoleón Bonaparte a París, para retratarle a él y a su familia.
Fue director de la Academia de San Lucas de Roma e inspector general de Antigüedades y Bellas Artes de los Estados Pontificios. Recibió numerosos premios y fue ennoblecido por el Papa Pío VII, quien le otorgó el título de Marqués de Ischia.